Todos los militares rusos abandonaron la localidad el 30 de marzo, mientras que las «pruebas de crímenes» presuntamente cometidos por ellos aparecieron solo cuatro días después de su retirada.
El Ministerio de Defensa de Rusia ha calificado de «provocación» las imágenes obtenidas en la localidad ucraniana de Bucha, situada en las inmediaciones de Kiev, que muestran cadáveres de civiles en las calles, y las ha calificado de mera «escenificación» de las autoridades ucranianas «para los medios de comunicación occidentales».
Asimismo, el organismo rechaza las acusaciones lanzadas contra sus militares por el asesinato de residentes de Bucha. «Todas las fotos y los videos publicados por el régimen de Kiev que, supuestamente, evidencian los ‘crímenes’ de los militares rusos en la ciudad de Bucha, en la provincia de Kiev, son una provocación más», aseguró el ministerio.

«Mientras esta localidad estaba bajo control de las Fuerzas Armadas rusas, ningún residente local fue víctima de acciones violentas», subrayó, al tiempo que agregó que los militares rusos entregaron a la población civil de la región de Kiev 452 toneladas de ayuda humanitaria.
Fuente RT